Mi padre ha sido diagnosticado de Disartria tras una hemorragia cerebral. ¿Hay tratamiento para mejorar su lenguaje y calidad de vida?
Significado de la disartria:
La disartria es un trastorno del habla que afecta a la articulación de las palabras y provoca dificultad o incapacidad para mover los músculos de la boca, la cara o del sistema respiratorio superior que controlan el habla. Los síntomas que la acompañan son: debilidad muscular, descoordinación respiratoria y alteraciones en la fonación, prosodia, resonancia y articulación, alterando por tanto el dominio y control del lenguaje oral. Sus causas pueden ser diversas, incluyendo tóxicas, metabólicas, enfermedades degenerativas, lesiones y tumores cerebrales, traumatismos y accidentes cerebro vasculares.
La labor del logopeda en estos casos es muy importante para su rehabilitación, dado que se encarga de valorar y analizar el habla disártrica, aplicar la metodología de rehabilitación adecuada al caso y actuar sobre las funciones alteradas de manera individualizada.
En esta valoración, el logopeda observa los siguientes componentes y procesos: los mecanismos motores del habla, la funcionalidad y valoración del sistema respiratorio, la funcionalidad del sistema fonatorio/resonador, la existencia o no de diadococinesias, la articulación, tanto en lectura como en habla y conversación, el ritmo y la prosodia del habla, y las alteraciones en la deglución y su seguridad.
Una vez completado la valoración, actúa desde una doble vertiente; primero con una metodología de actuación global, en la que se enseñan actividades de relajación, de respiración, de voz y de control buco-fonatorio; segunda, una actuación funcional, control de la deglución, la masticación y el control del babeo, si existe.
La importancia, por tanto, de la intervención logopédica se basa en la diversidad de aspectos funcionales que trata de gran importancia para el día a día. Dependiendo, evidentemente, del tipo de afectación y su grado su evolución, los resultados de la rehabilitación son en todos los casos positivos, siendo siempre beneficioso tanto el mantenimiento de la actividad motora, como el control de la seguridad en la deglución alterada.
Paloma Jiménez Fernández
Logopeda Clínica de ELEA
